Calaveras para maestros - Página 7 de 13

Basquetbolista ya retirado,
de la I.M.A. Profesor.
La muerte lo anda buscando
que se cuide por favor.

Yo le digo como amigo
que a la parca me encontré,
anda buscando marido
y Marcelo puede ser.

Yo no me quiero casar
asustado decía Chelo.
Yo me quisiera pasar
toda la vida soltero.

Eso no se va a poder
le contesta la huesuda.
Tú me tienes que querer
aunque yo sea tartamuda.

Marcelo se resignó
a casarse con la muerte
pero antes se despidió
de su hijo para siempre.

Coerrieron amonestaciones
pa´la boda celebrar,
y en la iglesia los pelones
se pusieron a bailar.

Entre cuatro zopilotes
llevan cargando a Marcelo,
solamente sus bigotes
nos dejaron de recuerdo.

Recen, recen, profesores,
pa´que pueda descansar
que mañana en los honores
lo vamos a recordar.

A la maestra Selene
le escribo esta calavera
pa´decirle que la quiero
aunque sea sin su melena.

Muy bonita se miraba
con su cabello muy largo
yo no se lo que pensaba
cuando decidió cortarlo.

Cuando sus alumnos vieron
que el pelo se había cortado
en su corazón sintieron
como un chuchillo clavado.

Pelucas debe comprar
de colores sugirieron
para volverla a mirar
tan bonita, le dijeron.

No se preocupen por esto,
que solo es por unos días.
Ayer soñé que la murte
en su tumba me metía.

Terminando de decirlo
la calaca apareció
y la maestra Selene
en el panteón terminó.

Ahora todos los niños
a su tubma llevan flores
recordando a su maestra.
Que vive en sus corazones.

Tomando clases de álgebra
estaba un día la calaca
escucahndo al profe Víctor
sentadita en su butaca.

Le llamaba la atención
del maestro su bigote
parecía que con tizón
se lo hizo un monigote.

La catrina enamorada
del profe Víctor quedó
y en una linda mañana
al panteón se lo llevó.

Lloran, lloran sus alumnos,
lloran con mucho dolor.
Y por eso hasta su tumba
le llevaron una flor.

Un luto en lo más profundo,
sus alumnos le guardamos
y ahoro que ya es difunto
una plegaria elevamos.

Ya nunca más lo veremos
dicen todos con tristeza
más siempre recordaremos
del maestro su nobleza.

Ya llegó el dos de noviembre,
Todos listos habrá que estar.
La huesuda con alambre
A toditos nos va a llevar.

Los maestros de la trece,
Todos trabajando están
Oyen gritos que estremecen:
¡Pobrecitos ellos perecerán!

Sabemos que el educar
Es intercmbiar saber
Y así universalizar
El enseñar a aprender.

El Consejo Técnico
Sesionaba a medio día
Y todo distinguido académico
Sus planes cumpliría.

A la víbora del amar
Jugaban las secretarias,
Todas irán a descansar
A las tumbas mortuarias.

Difícil para la muerte
Fue llevarse a Maribel;
Pues como mujer de suerte
La querían por doquier.

Calaveras aplicadas
Están en la Biología
Ángeles muy asustada,
Les da la clase del día.

Llegó la precoz huesuda
Al aula de computación;
Ella se creía picuda…
No encendió ningún monitor.

Una calaca hermosa
Entonaba su repertorio,
Fue con la comadre Rosa
Y ella le hizo un citatorio

Cerquita del almacén
Daba vueltitas la Parca;
Lupita le hizo un desdén
Y la pobre se fue en su barca.

Por Lupe vino la muerte;
Pero para su calvario,
La tenía Lupe por suerte
En riguroso inventario.

Los muchachos de intendencia
Asustados en su cuarto
Quieren calmar su conciencia
Barriendo todo elcamposanto.

El “ticher” Carlos dijo:
-Es mi turno calaveras,
Resuélvanme el acertijo,
¡con gusto me iré de veras!

Analizando los cuentos,
El profe Adán explicaba.
Vió a sus alumnos contentos…
¡la muerte se lo cargaba!

Arturo daba su clase:
Sentados en sus butacas,
Repetían toda la frase,
La muerte llenó sus arcas.

Números y más números
El Profe Álvaro enseñaba,
Pero su alumno Cisneros
Ningún examen aprobaba.

Ahí en prefectura
Anda rondando la parca,
Desea llevarse a una criatura
Y dicen que de ojos es zarca.

Los ilustres ingenieros
Sembraron trigo en la parcela;
La Parca hizo pucheros,
No tomarán más canela.

Hace poco recibimos
un maestro nuevo en la i.M.A.
De tan flaco que lo vimos
le compramos su mamila.

No se enoje profesor
sólo es broma… busco rima
pero cuídese señor
si aparece la catrina.

De susto yo no me muero
porque ya vivo asustado.
Que la muerte venga, quiero
para dormir a su lado.

No hace falta que lo grite,
porque yo ya estoy aquí,
le doy chance despedirse
de su adorada Anahí.

No me lleves calavera
ya se viene el estatal,
por última vez siquiera
déjame ir a jugar.

No se puede profesor
ya te tengo que llevar,
el torneo en el panteón
hoy acaba de empezar.

Pobre del maestro Miguel
ya no pudo ir a jugar,
la calaca en un tonel
se lo tuvo que llevar.

Sólo nos queda rezarle
pa´que pueda descansar
no podremos olvidarle,
lo queremos de verdad.

Vuelen lindas mariposas
díganle al profe miguel
que no tardando su esposa
irá a reunirse con él.

Los maestros de español
y también los de sociales
murieron de indigestión
por comer muchos tamales.

El 2 de noviembre llega,
fiesta muy tradicional,
cuando la parca llega,
y a todos nos quiere cargar.

Llegó a la escuela,
con una idea en la mente,
a llevarse para el panteón,
a todo personal docente.

Se dirigió al sexto A.
sostenida bien de sus pies,
a llevarse al cementerio,
al famoso Maestro Moises.

Este profe tenía fama,
de poner y quitar puntos,
pues él siempre pensaba,
que sus alumnos no daban frutos.

Adiós maestro querido,
sí lo vamos extrañar,
a la vez a Dios pedimos,
que no lo vaya regresar.

La calaca muy sonriente
ayer llegó a nuestra escuela
paseando al profe Clemente,
en su vieja parihuela.

Muy contentos sus alumnos,
se pusieron al mirarlo
y todos… uno por uno
corrieron a saludarlo.

La calavera les dijo
retírense por favor.
Que a su profe preferido,
ya su hora le llegó.

En coro todos gritaron,
¡no se lo lleve, señora!
Si quiere a cambio le damos
a una linda profesora.

No hago tratos con ninguno,
me llevo al profe Clemente.
A ver si en lo más profundo,
se le quita lo valiente.

Lloraban todos los niños
sin consuelo y con dolor.
Pedían que les devolviera
la muerte a su profesor.

Por mucho que suplicaron,
la muerte no desistió
y por la tarde enterraron
a Clemente en el panteón.

Ya le hicieron un rosario
pa´que pueda descansar,
sólo falta el novenario
pa´que al fin descanse en paz.

En Montessori una señorita andaba de arriba abajo
Era la miss Vicky apurada con tanto trabajo
Los números y letras a los niños les pedía,
Las planas completitas… -ella les advertía-.

Sus alumnos tan tremendos, nada que le hacían caso
Pues jugaban y saltaban los chamacos con un lazo.
La muerte al ver la situación, pensó:
¡A esta condenada hasta le hago un favor!
Me la llevo sin dudarlo a dar clases al panteón.

Sus alumnos muy tristes, lloraban y lloraban:
¡QUE REGRESE LA MAESTRA! -Todos le gritaban-
La huesuda ya muy brava un balazo les tiró,
A todos y cada uno de los niños del salón.

En sus tumbas ya reposan sus huesitos sin dolor
Pero Vicky no se salva de sus niños,
Ni siquiera en el panteón.