Calaveras para maestros - Página 4 de 13

De los machines Armando
falta de pasarle lista,
la muerte quiere una pista,
tiempo ha lo anda buscando
desde el norte preguntando.

La parca lo localiza,
un guadañazo le atiza,
mándalo al cementerio,
es un profesor muy serio,
esta crisis se agudiza.

Por la dirección andaba
entregando oficios Janeth,
hojeaba un libro de Piaget
tan absorta en esto estaba
dice la parca calmada:

ya no harás más labores
te llevo con los honores,
que mereces buena maestra,
permanecerás a mi diestra,
te evitaré sinsabores.

Maestra me siento muy mal,
me siento ya casi muerta!!!
Pero si usted ya está cadáver,
le dijo Tanya a la interfecta.

No se burle usted de mí
porque vengo en estas fechas,
es que anoche no dormí
por andar en las pachangas.

Hubo fiesta en el panteón
y bailé con muchos muertos
hasta un rico rock and roll
bailé con mis ancestros.

Un primero de Noviembre,
En una fría mañana,
Se acercaba con guadaña,
La muerte a la secundaria.

Era el colegio Álzate,
Su misión era directa,
Iba feliz pero lenta,
Su palidez muy perfecta.

Llegó temprano a la escuela
Y con gracia sin igual,
Se dirigió hacia las aulas,
A buscar a quien llevar.

ING. IMELDA
(Maestra de biología)

Cerca del laboratorio,
Encontró a la maestra Imelda,
Dando su clase de ciencias,
Con cariño y gran paciencia.

La muerte entró al salón,
Y pensó muy seriamente,
Llevarse a la maestra Imelda,
Hoy en su grupo está ausente.

PROFESOR SAUL
(Maestro de geografía)

Con su alegre y gran sonrisa,
De geografía daba clase,
Era el maestro Saúl,
que enseñaba de volcanes.

También hablaba del clima,
De los ríos, de los mares,
De las fronteras en mapas,
De la lluvia y sus lugares.

Cuando se acercó la muerte,
Se quedó con boca abierta,
Pues esa clase era amena,
Entretenida y directa.

La muerte desubicada,
De tanto lugar visitado,
Necesitaba al maestro,
Hoy don Saúl, es su aliado.

MAESTRA DULCE
(Maestra de matemáticas)

Entre números quebrados,
Fracciones y divisores,
Estaban todos atentos,
A su clase y sin temores.

Era la maestra Dulce,
Que con certeza enseñaba,
Con sistemas muy modernos,
Y ejercicios en cuadernos.

La muerte llegó norteada,
Con tanto número y cuenta,
Que se llevó a la maestra,
Al panteón en su carreta.

Era un día normal, el comienzo de un ciclo escolar
En el grupo de la calaca, de segundo A
Estaban todos los alumnos impacientes a observar
El nuevo profesor que les iba a tocar

Era un profesor que muchos problemas les iba a dar
Pues a este profesor matemáticas le tocaba enseñar
Esperando a que el timbre tocaran
Todos callados se encontraban

Al fin llegó el momento que tanto esperaban
El profesor por fin llegó y ante ellos se presentó
A muchos él no les agradó
Pues fama de exigente él se creó

Solo a la calaca le llamo la atención
y antes de juzgarlo a él se acercó
Con él conversó todo un ciclo escolar
Son tantos los momentos que vivieron que no acabaríamos de narrar

Creando así un vínculo muy inusual, un vínculo familiar
Como a su papá ella lo quería
Y como a su hija él la quería
Ya que con su padre ella no se llevaba muy bien

Y él a una hija tener era lo que más quería
Ambos se comprendían y entendían
Y a ella mejor calaca la hacia
Ambos sabían que no podían conversar

Pues la muerte se lo iba a llevar
La calaca no entendió y por su culpa él murió
Ella muy triste se quedó
Mientras al grupo esto le encantó

Ella no paraba de llorar pidiendo su perdón
Pero a la muerte esto no le importó
y con la calaca se enojó
Para la pobre calaca nada mejoró

Pues después de esto a muchos ella mató
La calaca sola creció
Y en la muerte se convirtió
Esperando algún día regresar con esa persona tan especial

Que no solo le bastó con enseñar la multiplicación
Él logró enseñarles el sentido de la vida
Y lo que es la hipocresía
Así como la injusticia que cada día se veía

La huesuda del panteón salió
A buscar a la directora se dirigió
La quería mandar al panteón
Para que durmiera como un león.

La calaca a la directora se la encontró
Ésta muy asustada corrió
Pero la huesuda la alcanzó
Y al costal la echó.

Ya estando en el panteón
La calaca la enterró
Para que durmiera como un león
Hasta que un ratón la despertó.

Estaba mi maestra
sentadita en su escritorio
cuando llega la calavera y la dice:
maestra querida su hora ha llegado
pues su funeral yo he arreglado.

La maestra espantada le responde:
no usted ha equivocado de salón
pues yo tengo trabajo un montón.
La parca suelta una risita
pues saca un costal
y para adentro la maestra se va.

Los alumnos lloran a su maestra
pues del susto ha muerto hoy.

Ya la muerte está contenta
Brinca de tanta emocioó
Por que al maestro Jaime
Se llevará al panteón

No se escondan ni se aflijan
Que ese día llegará
Cuando menos se lo esperen
A la maestra Lupita se llevará

Los demás no canten victoria
Ni piensen que ya se libraron
Por que el diablo y sus secuases
A esa fiesta ya los habrán invitado

Estaba el maestro Jesús
dando su clase,
vino la calavera
y le dijo esto así no se hace.

La calavera muy contenta
quiso dar una demostración,
y comenzo a dar la clase
con toda dedicación.

El maestro Jesús muy enojado
la guerra le declaró,
le dio lastima a la pobre
y al panteón se lo llevó.

La calavera, del maestro
no tuvo compasión
pues ahora ser maestra
es su nueva vocación.

Llegó la calavera a la Venustiano Carranza
por un maestro que se cayó de panza,
al ver la calaca los maestros se espantaron
y de puro miedo toditos se desmayaron…

La calaca pasó entre ellos con una tablita
y se llevó de los pelos a la maestra Paulita
y sin razón a la conserje del portón.

Tristes están los maestros
porque la calavera decidió
pero a la vez contentos
porque a ellos no los eligió.