Cada año se les espera,
con mucha alegría y cariño,
por eso es que se les pone
en un altar todos los guisos,
los dulces y las bebidas
que consumían con agrado
cuando ellos estaban vivos.Aunque ya no estén aquí,
en presencia con nosotros,
sabeos que desde el cielo
nos cuidan y nos protegen,
por eso en estos días
como un gracias, un te quiero
y de ti siempre me acuerdo,
ponemos un altarcito.No importa el tamaño que tenga,
si tiene mucho o poquito,
lo importante es que te acuerdes
de todos los seres queridos
que dejaron este mundo
pero que siguen contigo.Por eso nunca olvides,
ni pierdas la tradición,
como mexicano que eres
recuérdalos con cariño
con un altar en su honor.
A mis difuntos queridos
Calavera enviada por Ven Oropeza el 24 de octubre de 2015.